El acceso a fruta y verdura de importación está a la orden del día. En los supermercados, grandes almacenes e incluso en fruterías locales encontramos alimentos que no se corresponden a la temporada actual. Sin embargo el consumo de fruta y verdura de temporada tiene grandes beneficios para nosotros, sin olvidarnos de los que tiene para el ecosistema.
- Ayuda a reducir la energía y las emisiones de CO2, puesto que no hace falta gastar tanta energía para el transporte.
- La fruta y verdura local se recoge en su punto óptimo de maduración y es más sabrosa que la que va a ser transportada, que se recolecta verde y va a madurar artificialmente en los contenedores.
- Ayuda a impulsar y mantener la economía local, fomentando los pequeños negocios y manteniendo puestos de trabajo del propio pueblo o ciudad.
- La naturaleza es sabia y nos ofrece en cada estación lo que necesitamos.
- Se evita la implantación de monocultivos intensivos que agotan la tierra, favoreciendo la sostenibilidad del planeta.